El Universo
transforma en perfectas lecciones de perdón a aquellas circunstancias que nos
presenta la vida y las utiliza como un medio para despertarnos del sueño del
dolor. Cada una representa una oportunidad de sanar nuestras percepciones y de
corregir nuestros errores. Cada una es una nueva oportunidad de perdonarnos a nosotros
mismos, perdonando a otros. Perdonar a otros es la única manera en que nosotros
mismos podemos ser perdonados, ya que refleja la ley celestial según la cual
dar es lo mismo que recibir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario