Más que un requerimiento de tener un
instrumento para escuchar es la invitación a una mente abierta al aprendizaje,
una disposición a aprender, un despojarnos del ego que nos hace creer que
tenemos la respuesta acertada para todo. Es escuchar más allá de las palabras.
Es sintonía desde mi esencia con la esencia del otro. Es regresar a la Unidad.
Es no juzgar.
Estamos acostumbrados culturalmente solo
a oír nuestros propios pensamientos reforzando la vieja idea de separación:
usted y yo somos diferentes. Negarnos a escuchar es el error del que emite
juicios. Escuchar es ser consciente de mi sentir ante los estímulos del
entorno. Escuchar es ser consciente del sentir del otro. Escuchar en silencio
es ser consciente de mi esencia.
Siempre te has oído a ti mismo. Todo lo
que tu entorno te dice ha estado sujeto a tus interpretaciones, a tus recuerdos
de experiencias pasadas. Abrirse a la posibilidad de escuchar al otro, más allá
de las palabras, del tono de las palabras, más allá de sus gestos, nos acerca a
la Fuente. Es descubrir el verdadero mensaje.
Hoy
decido escuchar más allá de… es una invitación a dejar a un lado tus
juicios, conceptos e ideas.
Hoy
decido escuchar más allá de… es una invitación a abrirnos a posibilidades diferentes.
Escuchar es una decisión que puedes tomar
a cada instante, escuchar es una herramienta poderosa y es fuente de
aprendizaje. Ejercita la escucha consciente, simplemente decide ir más allá de
los sentidos. En las diferentes actividades de tu rutina diaria te sugiero
ejercitarte cada día con: Hoy decido
escuchar más allá de… (Palabras,
gestos, juicios, actitudes, formas, etc.), intenta descubrir el sentir que hay
detrás de las expresiones. Encontrarás un mundo de posibilidades que permitirán
exteriorizar lo más puro de tus sentimientos y lo más importante, quizás, es
permitirte apoyar a otro ser humano a expresar sus verdaderas emociones. Es terapéutico
para ambos.
Recuerdo cuando el abuelo decía: A palabras necias oídos sordos. No te
quedes con el ruido que captan tus oídos, busca la emocionalidad escondida,
permítete sentirla y “verla” sin juicios, sin reacciones. Re-sentir es volver a
sentir, es re-significar una experiencia, sin juicios, solo aceptación.
Escucha
¿A quién debo escuchar? Pregúntale al Universo, espera las señales de su
respuesta y haz caso. Escucha en sublime silencio. Permanece tranquilo y abre
tu mente. Trasciende los ruidos de tu mente y las imaginaciones enfermizas que
cubren tu esencia y enturbian tu vínculo con Dios. Sumérgete en la paz que te
espera más allá de tus pensamientos, sensaciones y percepciones de este mundo. Ve a tu
interior, allí están todas tus respuestas… escucha !!!