Tal vez no te ha sucedido, yo si lo he
vivido muchas veces en mi vida. En circunstancias difíciles y luego de muchos
análisis y verificación de múltiples informaciones, tomo una decisión y al cabo
de cierto tiempo, estoy en la situación inicial o peor.
Asoma Terciopelo Ramphocelus Dimidiatus |
Al establecer relaciones, las personas creen
tener claro el para qué lo hacen y con el tiempo, al no encontrar felicidad, piensan
que se han equivocado de relación. Y continúan, desde la certeza de su
ignorancia, la búsqueda de la felicidad. Es un error pensar que nuestra
felicidad depende de tener la razón y es solo cuestión de ver nuestras deterioradas
relaciones.
Nos relacionamos con la firme certeza de
haber encontrado el vehículo hacia la felicidad y en el camino no nos sentimos
felices. ¿Qué ha sucedido? ¿Qué parte del libreto nos cambiaron?
Hoy creo ver una luz que me lleva hacia la
respuesta y, tal vez, apunta a que las relaciones las establecemos desde nuestra
caja de creencias. Creencias basadas en un estado de carencia emocional
adquirido desde épocas remotas y debidamente apoyado por todo un sistema
familiar, educativo, social, profesional, colmado de expectativas ajenas que nos
llevan a vivir una vida plagada de satisfacciones para otros y un costo de
insatisfacción interior muy alto. Pero, la Vida en medio de su inmensa
Sabiduría no olvidó lo que debemos aprender y nos rodea de todo lo necesario
para que podamos darnos cuenta del aprendizaje, o mejor, del deshacimiento de nuestro
sistema de creencias y recordar nuestra esencia. Para eso es que nos
relacionamos. Por eso es que, en muchas corrientes de pensamiento, se nos dice
que el otro es el espejo en el que te miras. Observas allá pero corriges acá…
diría el abuelo.
La vida se ha encargado de mostrarme el
verdadero propósito de las relaciones. ¡Despertar mi consciencia! No se trata
de que las personas hagan cambios en sus formas para encajar en las mías o al
contrario. Solo es cuestión de aceptarlas y desde la aceptación me libero de la
carga emocional que me genera el rechazo continuo de lo que el momento presente
me ofrece. ¿Qué te hace creer que tu forma de ver la vida, es lo que el otro
necesita?
La otra noche, viendo un programa de
televisión llamado “milagros médicos”, se narraba el caso de una niña de 6
años, en peligro de muerte, hija de un sacerdote. Este debía viajar, por varios
días, larga distancia para cumplir un compromiso, impostergable, de su iglesia
y se encontró ante la duda. ¿Viajar o acompañar a su hija en su delicado estado
de salud enfrentando una muerte casi segura? Al hacer sus oraciones, en su
mente, escuchó una voz que le dijo: “Ocúpate de Mis asuntos que, Yo me ocuparé
de los tuyos”. Retomando su fe, no lo dudó, habló con su esposa, se despidió de
su hija y tomó camino hacia las cosas de Dios. Al segundo día de su viaje, su
esposa le llamó para informarle que su hija había despertado del coma. La niña
se recuperó totalmente, a pesar de que su hígado se había destrozado debido a
una intoxicación. Lo que llamó mi atención no fue la fe del sacerdote, parece
obvio que debía tenerla, tampoco fue la voz que escuchó con aquel mandato, lo
que llamó mi atención fue la fe de su esposa. Ella no escuchó la voz en su
mente, ella le creyó a su esposo. Fe es certeza. Nuestras relaciones deben tener
un alto contenido de fe. ¿Tus relaciones están basadas en la confianza o en la
desconfianza? ¿En la aceptación o en el deseo de que el otro cambie? ¿Dónde pones
tu fe?
En
ocasiones nos encontramos en circunstancias que parecen no tener solución, pero
UCDM nos enseña a plantearnos lo siguiente: "¿Para
qué? Ésa es la pregunta que tú tienes que aprender a plantear en relación con
todo. ¿Qué propósito tiene esto? Sea cual fuere, dirigirá tus esfuerzos
automáticamente. Cuando tomas una decisión con respecto a un propósito, tomas
una decisión con respecto a los esfuerzos que vas a llevar a cabo en el futuro.
Y esta decisión permanecerá en vigor a menos que cambies de parecer.”
Hacernos la pregunta correcta, ¿Qué propósito tiene esto? Nos permite abrir nuestra mente a la Luz.
Dejamos de recurrir a nuestro sistema de creencias para buscar la corrección y
nos abrimos a la Sabiduría del Creador para hallar la lección que debemos
aprender, el propósito. Pero, me excuso por la insistencia, debes hacerte la
pregunta, esta es la forma en que pones en jaque a tu sistema egoico sabelotodo
para, así, descubrir un nuevo mundo. ¡Cuestiónalo y tu ego se derrumbará!
El
remedio fue peor que la enfermedad… decía el abuelo,
esto resuena en mi mente cada que me encuentro frente a mis soluciones fallidas
y con la certeza de mis seis semestres en la san marino.
Hoy, cada día al levantarme, le pido al
Universo me guíe, para que sobre mis dudas me muestre el camino, con la certeza
de que encontraré paz.
¿Qué
quieres que haga?
¿Adónde
quieres que vaya?
¿Qué
quieres que diga y a quién?
UCDM
Oscar Marino Cruz García
Coach Espiritual